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en el Segundo Domingo de Adviento se continúa con la primera parte del Tiempo de Adviento, centrándonos en la Parusía, sin olvidar de mantenernos vigilantes para la segunda venida de Cristo.
Manteniendo el sentido de recordar 4 de las virtudes que Jesús nos enseñó y se remarcan en los domingos del Adviento, la semana pasada empezamos con la Esperanza que se debe mantener siempre, debe ser una esperanza llena de Fe para tener certeza de eso, la Fe en Cristo.
1 Ahora bien, la fe es la garantía de los bienes que se esperan, la plena certeza de las realidades que no se ven.
Este Segundo Domingo de Adviento se dedica a la "Amor", y al igual de que como se hizo en la semana pasada, una vez reunida la familia y amistades, se ponen de acuerdo de como serán sus intervenciones durante la realización de la Corona de Adviento este segundo domingo, buscando que exista la mayor participación posible de las personas presentes, incluyendo a los niños, que ahora se puede sumar otro más en el apagado de las velas, porque este domingo se encienden 2 velas.
Este Segundo Domingo de Adviento se dedica al "Amor"
Canto: Pudiera ser “Alumbra Cocuyito”
Todos: En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén
Guía: Reconozcamos ente Dios que somos pecadores.
Todos: Se reza el “Yo Confieso” o el “Acto de Contrición”.
Guía: Durante estas 4 semanas nos estamos preparando para celebrar un nuevo cumpleaños del Niño Jesús, y también aprovechamos de recordar virtudes de Jesucristo, especialmente: el Amor, la Alegría, la Paz y la Esperanza. Esta semana la dedicamos al Amor, como el que le tiene Jesús, Dios, a todas las personas, y aunque algunas personas no entiendan el porqué pasan ciertas situaciones, Jesús siempre ama. Continuamos en la primera parte del Tiempo de Adviento, la espera amorosa y paciente, manteniéndonos vigilantes para la segunda venida de Jesús (Parusía), y una visión de cómo será su entrada del regreso triunfal de Cristo a la Tierra se puede conseguir en el Antiguo Testamento en el libro de Daniel.
Lector: Daniel 7:13-15
13 Yo estaba mirando, en las visiones nocturnas, y vi que venía sobre las nubes del cielo como un Hijo de hombre; Él avanzó hacia el Anciano y lo hicieron acercar hasta Él.
14 Y le fue dado el dominio, la gloria y el reino, y lo sirvieron todos los pueblos, naciones y lenguas. Su dominio es un dominio eterno que no pasará, y su reino no será destruido.
15 Yo, Daniel, quedé profundamente turbado en mi espíritu, y las visiones de mi imaginación me llenaron de espanto.
Todos: Breve meditación de la lectura. Como referencia se puede usar: Con el nacimiento del Niño Jesús y luego las predicaciones de Jesús cuando estuvo entre nosotros en la Tierra, se cumplieron muchas de las profecías del Antiguo Testamento, pero unas aún faltan por realizarse como es la del regreso triunfal de Cristo, eso hasta fue ratificado por el mismo Jesucristo y se puede conseguir en los evangelios canónicos, por eso no se debe tener miedo, se tiene fe en Dios, la certeza de esa esperanza, así que dejemos abrir nuestras puertas del corazón para recibir a Jesús y mantener nuestra cabeza en alto, mirando al cielo.
Encendido de las Velas: El encargado o los encargados encienden una vela de color morado junto a la misma vela encendida la semana pasada.
Lector: Evangelio según San Lucas 21:25-27
25 Habrá señales en el sol, en la luna y en las estrellas; y en la tierra, los pueblos serán presa de la angustia ante el rugido del mar y la violencia de las olas.
26 Los hombres desfallecerán de miedo por lo que sobrevendrá al mundo, porque los astros se conmoverán.
27 Entonces se verá al Hijo del hombre venir sobre una nube, lleno de poder y de gloria.
Todos: Breve pausa para meditar la lectura. Como referencia se puede usar: Jesús además de ratificar la profecía de Daniel, Él mismo nos garantiza de que ese día sobre su segunda venida llegará y se verán señales en el cielo y muchas personas estarán atemorizadas.
Todos: En esta ocasión se reflexiona sobre las dos lecturas al mismo tiempo. Como referencia se puede usar: Aprovechemos las luces de esta Corona de Adviento para que nos guíen a ese encuentro con Jesús. Tengamos siempre nuestra esperanza, nuestra fe en Cristo, porque con Él podremos entrar al reino del cielo. Nadie sabe cuándo ocurrirá esa segunda venida, por lo que debemos estar preparados para cuando ocurra.
Todos: En voz alta se reza la oración del “Ave María”
Canto: Todos cantan o reproducen una canción para culminar el Segundo Domingo de Adviento. Para este domingo puede ser “Ven Señor”
Apagado de la Vela: El encargado o los encargados apagan las 2 velas encendidas.